La Iglesia latina tiene en gran estima el órgano de tubos, como instrumento musical tradicional, cuyo sonido puede aportar un esplendor notable a las ceremonias eclesiásticas y levantar poderosamente las almas hacia Dios y hacia las realidades celestiales.
El órgano se consideró, desde el inicio de la construcción del santuario, que tenía que ser de la talla del templo que se estaba alzando. La primera fuente de información para el propio arquitecto fue Luis Alfaro Fournier, nieto del fundador de la famosa fábrica de naipes 'Heraclio Fournier', y por aquel entonces profesor de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Navarra, gran admirador de los órganos electrónicos, quien aportó suficientes razones para desechar la instalación de un órgano de tubos: había que afinarlo, algo muy costoso, se llenaría de polvo y para su funcionamiento necesitaba un fuelle. Entre las ventajas del órgano electrónico, señalaba una fundamental: apenas ocupaba espacio.
Este era el gran problema: el espacio disponible era reducido. En un primer momento se proyectó un gran coro junto al presbiterio, pero, al ampliar éste, quedó el coro reducido a su mínima expresión: ya no admitía un órgano de tubos. Como el arquitecto estaba convencido de que se iba a colocar un órgano electrónico, no había ningún problema. Pero, poco después, se planteó la posibilidad del órgano de tubos. Se pidió información a tres talleres de organería, y finalmente, se encargó al organero Gabriel Blancafort i París, de Collbató. Como ya no cabía en el coro mínimo que había quedado junto al presbiterio, se barajaron distintas posibilidades. La más adecuada era irrealizable: no se podía colocar el órgano sobre la galería superior, porque sobre ésta se encontraba una viga de hormigón de 5 m. de altura que imposibilitaba la profundidad requerida por el órgano, de 4 a 5 m. para un órgano de 4.000 tubos. Además ocupaba mucho espacio, y un espacio importante, por estar en el eje del altar.
Con el santuario ya en fase avanzada de construcción, la nueva ubicación del órgano había que resolverla cuanto antes, ya que éste necesitaba un espacio considerable. Habiéndose conseguido que la iglesia tuviera unas galerías superiores para ampliar su capacidad, y si se ponía el órgano al fondo, los tubos iban a quitar toda la visibilidad. Si se colocaba al lado de la galería superior se obstaculizaba menos la visibilidad y, además, el coro podría ocupar ese lado de la galería. Se pensó en la espectacularidad que supondría ver el órgano enfrente al entrar en el Santuario. Además los órganos en España siempre se han colocado habitualmente en el antiguo lado de la Epístola.
Esta era la solución idónea: el órgano disponía de espacio suficiente, y el extremo de la galería superior que inutilizaba el instrumento, serviría para el coro. Además tenía una excelente visibilidad del altar, de la iglesia y del coro pequeño. Y realmente, el impacto al entrar en el templo sería impresionante: la fachada del órgano sería la primera impresión en la retina de los peregrinos.
Así pues, el santuario cuenta con dos órganos: el gran órgano de tribuna con tres teclados manuales y pedalero, y un órgano de coro de un sólo teclado manual y pedalero. El segundo tiene su propia consola en el coro contiguo al presbiterio, mientras que la consola general situada en la tribuna lateral cercana al presbiterio, permite tocar ambos órganos a la vez o de forma independiente, mediante un cuarto manual que controla el órgano de coro. Así pues, el conjunto de ambos órganos forma un instrumento de cuatro teclados y pedalero, compuesto de distintos cuerpos, cada uno de los cuales podría considerarse como un instrumento autónomo.
El órgano se compone de 4.072 tubos de órgano, más 25 campanas tubulares. De ellos, 565 pertenecen al órgano de coro y 3.507 al Mayor. De ordinario, las organistas acompañan la santa misa el fin de semana, así como la exposición y bendición del Santísimo que tiene lugar todos los sábados y domingos del año a las 17 horas. También acompañan las peregrinaciones que acuden con alguna imagen de la Virgen, o la de las que lo solicitan, así como las bodas y las ceremonias litúrgicas que se celebran en el santuario de manera solemne, como por ejemplo, Semana Santa, ordenación de diáconos y sacerdotes, Jornada Mariana de la Familia, etc.
Son tradicionales el concierto de Navidad y la actuación de agrupaciones corales en el mes de mayo. Pero lo más llamativo es, sin duda, el Ciclo Internacional de
Música que se celebra en el mes de agosto. A una belleza sin igual por su forma y por la arquitectura del santuario, se une una acústica casi perfecta. El Ciclo Internacional de Órgano es una iniciativa musical de reconocido prestigio entre los festivales europeos en su categoría de música sacra. La calidad de los intérpretes y una cuidada selección del repertorio, procurando especialmente acercar el órgano al gran público, vienen acompañados por un notable número de personas que disfrutan de estos conciertos.
Música que se celebra en el mes de agosto. A una belleza sin igual por su forma y por la arquitectura del santuario, se une una acústica casi perfecta. El Ciclo Internacional de Órgano es una iniciativa musical de reconocido prestigio entre los festivales europeos en su categoría de música sacra. La calidad de los intérpretes y una cuidada selección del repertorio, procurando especialmente acercar el órgano al gran público, vienen acompañados por un notable número de personas que disfrutan de estos conciertos.
La organista Montserrat Torrent i Serra tuvo ocasión de participar en el Ciclo Internacional de Órgano de Torreciudad en 1995, fecha en que con motivo del vigésimo aniversario de la inauguración del santuario, comenzaba este Ciclo Internacional su primera edición. Era la primera vez que Montserrat visitaba el santuario y calificó el órgano de Torreciudad como 'grandioso, muy valiosos e insólito, con un sonido muy bonito que tiene todas las posibilidades'. Añadió que 'sólo en catedrales de Alemania he encontrado órganos de este tipo, un órgano de setenta juegos y cuatro teclados es insólito, lo normal son treinta o cuarenta juegos. Encontrarse esto es muy raro en España'.
Artículos y audioguías relativas al Santuario de Torreciudad:
- (I). Introducción.
- (II). Origen.
- (III). La antigua ermita.
- (IV). El templo.
- (V). El retablo.
- (VI). La imagen de Ntra. Señora.
- (VII). El órgano.
- (VIII). Sendero de los Dolores y Gozos de San José. (1ª parte).
- (IX). Sendero de los Dolores y Gozos de San José. (2ª parte).
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