Ver. Camino Monasterio de El Pueyo. en un mapa más grande
Duración aproximada: 3 h. y 40 min.
Distancia aproximada: 13 km.
Desnivel: 262 metros.
Dificultad: Baja.
Época: Todo el año.
Punto de partida: Cruz en el barrio de Santa Bárbara, situada al final de la Calle Virgen del Plano.
MIDE:
-Severidad del medio natural: 1.
-Dificultad de orientación: 1.
-Dificultad de desplazamiento: 1.
-Esfuerzo requerido: 3.
Recomendaciones: Llevar calzado adecuado, evitar salir al monte en los días de máximo calor y llevar algo de agua, aunque en el Monasterio hay fuente de agua potable.
Distancia aproximada: 13 km.
Desnivel: 262 metros.
Dificultad: Baja.
Época: Todo el año.
Punto de partida: Cruz en el barrio de Santa Bárbara, situada al final de la Calle Virgen del Plano.
MIDE:
-Severidad del medio natural: 1.
-Dificultad de orientación: 1.
-Dificultad de desplazamiento: 1.
-Esfuerzo requerido: 3.
Recomendaciones: Llevar calzado adecuado, evitar salir al monte en los días de máximo calor y llevar algo de agua, aunque en el Monasterio hay fuente de agua potable.
El término Pueyo viene del latín 'podium', que significa 'lugar alto'. Y es que el Monasterio se sitúa sobre un monte cónico elevado a 603 metros sobre el nivel del mar. Parece verosímil la existencia en esta peña de un castillo en la Edad Media, que probablemente lo utilizarían los cristianos en 1099 para lanzarse a la conquista de la ciudad del Vero; y que anteriormente habría estado en posesión de los musulmanes. Las primeras menciones documentales son del siglo XII, precisamente en el momento de la conquista de la ciudad.
Partiendo desde cualquier lugar de Barbastro debemos dirigirnos al punto inicial de nuestra marcha ubicado en la Cruz del barrio de Santa Barbara, de donde parten dos caminos. El de la derecha nos conduciría a la ermita de la Virgen del Plano, pero nosotros cogeremos el de la izquierda que nos permite tomar el Camino de los Canónigos, atravesando los depósitos que suministran agua potable a la ciudad y cruzando la acequia de Selgua, discurrirá nuestra caminata entre campos de oliveras, almendreras y de cultivos propios de la zona.
La leyenda se sitúa tras la conquista definitiva, en el año 1099, de Barbastro por Pedro I, y coincidiendo con la llegada del decreto papal para el traslado de la sede episcopal desde Roda de Isábena a Barbastro. Cuentan que un pastorcillo, apenas adolescente, llamado Balandrán, originario de Morilla (hoy en día una aldea perteneciente a Ilche), habiendo conducido una noche de abril de 1101 su rebaño a la cima del monte, oyó desde la cabaña donde dormía, músicas celestiales y voces, llamándole por su nombre hasta tres veces. En medio de la noche oscura, presa del temor, salió fuera de su refugio pastoril y se topó con la imagen de la virgen entre las ramas de un almendro, rodeada de ángeles. Comunicó la noticia a los vecinos de Barbastro, pero en un principio dudaban de sus explicaciones, sin embargo, una marca en el rostro del pastor confirmaba la aparición de la Virgen. Entonces los barbastrenses no dudaron en subir en procesión y edificaron a la virgen una primitiva ermita al estilo rústico y tradicional de la zona.
En aquella modesta ermita San Balandrán sirvió de sacerdote toda su vida hasta su muerte. En una pequeña estancia vecina a la iglesia del actual monasterio se halla una tumba de características góticas donde se haya sepultado San Balandrán, el cual era un hombre de gran estatura y poderío físico para aquella época. Cuenta una tradición oral de la Comarca del Somontano que los hombres y mujeres en edad de merecer debían ser capaces de abarcar con sus brazos extendidos toda la longitud de la tumba a fin de poder conseguir pretendiente con el que llegar a compartir los rituales sagrados del matrimonio.
El camino de los Canónigos nos lleva hasta coger el camino de los Oncenos. La historia dejó testimonio de cómo fue la primera peregrinación al Pueyo, que con seguridad transcurrió por los mismos caminos que nosotros recorremos ahora: 'Fue una devota y solemne procesión, compuesta del clero, autoridades y pueblo. Balandrán la precedía, como Moisés al pueblo hebreo. Todo el pueblo se postró alrededor del privilegiado almendro, adorando con lágrimas de ternura a la Reina del cielo en su devota imagen y dando gracias infinitas a Dios por el inmenso beneficio. Secundada así la Voluntad de Nuestra Señora, de que el pueblo de Barbastro acudiera a venerarla, los asistentes a la procesión regresaron a la ciudad a la caída de la tarde'. Y así es como nació la tradicional romería, conservada hasta nuestros días, y que cuenta con más de novecientos años de historia.
El camino de los Oncenos nos conduce hasta una humilde ermita dedicada a San José, a los pies del monasterio, donde es necesario reunir ánimos para emprender la cuesta final. Esta ermita y su altar han sido restaurados recientemente por la Asociación de Amigos del Pueyo. Este último tramo coincide con el acceso asfaltado desde la carretera N-240 hasta la cima del monte. Pero antes pasaremos junto a la Plaza del Sol, escenario de celebración de comidas populares y actividades lúdicas los días de romería; para finalmente alcanzar el Monasterio de El Pueyo.
La actual iglesia del Monasterio data del siglo XIV. Es un templo gótico de una sola nave con la cabecera ampliada a mediados del siglo XVII. El retablo de 1630 fue destruido en la Guerra Civil. El Camarín de la Virgen se puede visitar pasando por detrás del altar para ver una imagen de madera policromada de la misma, donde los devotos suelen rezar y depositar una limosna; es obra del siglo XVIII y está decorado con frescos de Francisco Bayeu sobre escenas de la vida de la Virgen, y restaurados en 1994 por Liberto Anglada. La Virgen se trata de una copia, la original fue robada. También son de destacar los mantos de la Virgen o la tosca sillería del coro de la iglesia hecha por los mismos monjes.
Nuestra Señora del Pueyo despierta gran devoción en el Somontano, como atestiguan por ejemplo los sepulcros de Diego de Berbegal y Ana Buil que se conservan en el interior y las numerosas poblaciones de la comarca que celebran durante la primavera romerías hacia el Santuario. Estas romerías populares al santuario comienzan el primer lunes de Pascua y se prolongan hasta los meses de verano, generando una actividad lúdica, social, cultural y religiosa.
En el siglo XVII subían en romería mas de 50 pueblos, casi todo el Somontano; en el siglo XVIII, eran 33; a principios del XIX, durante la Guerra de la Independencia, son sólo nueve: Barbastro, Antillón, Blecua, Bespén, Fornillos, Permisán, Pozán de Vero, Peraltilla, Abiego y Castillazuelo.
Los más antiguos subiendo son Antillón, Bespén y Blecua, romerías en las que sólo participaban hombres, y datan de 1545. Peraltilla sube desde el año 1645. Cesó en 1877, pero luego reanudó su romería hasta el 1931, en que de nuevo cesó hasta pasar la Guerra Civil.
En el año 1251 el rey de Aragón Jaime I el Conquistador fecha en Lérida un decreto por el que concede al Pueyo de Barbastro una capellanía oficial, cumpliendo así la petición de su esposa por establecer un Santuario en el Pueyo.
En el año 1834, durante la desamortización de Mendizabal, un grupo de prohombres barbastrenses consiguió recuperar el Santuario para la ciudad del Vero gracias a una rápida galopada entre ambas ciudades. La política de desamortizaciones pretendía vender en pública subasta los terrenos del clero y recaudar fondos para el Estado. Uno de los bienes subastados serían los terrenos del Monasterio de El Pueyo. Estaba previsto sacarlo en pública subasta primero en Huesca y unas horas después en Barbastro. Pero un grupo de vecinos de Barbastro se confabularon para impedir que estos terrenos cayeran en manos de personas o empresas ajenas a la ciudad. Así, se recaudó dinero y se decidió participar en la subasta con el fin de que estos terrenos fueran de propiedad municipal. Pero para ello había que saber cuál era la cantidad ofertada en Huesca, para horas más tarde subir la cifra en la subasta a celebrar en Barbastro. Se estableció la siguiente estrategia: un jinete barbastrense acudiría a la capital para conocer la cifra pujada y después recorrer a caballo la distancia de vuelta. A lo largo de los más de cincuenta kilómetros se prepararon varios caballos para permitir al jinete llegar antes del final de la puja que se celebraba en Barbastro.
Hoy en día se rememora anualmente este hecho histórico, gracias al Club de Atletismo de Barbastro, con una carrera simbólica saliendo de la Delegación de Hacienda en Huesca y con meta en el Santuario; estableciendo varios relevos con el fin de hacer la prueba más llevadera y participativa. Y una vez llegados al Santuario se entrega a la Virgen una réplica del acta notarial de propiedad del Santuario para recordar que el esfuerzo de unos barbastrenses en el siglo XIX permitió que hoy todos los vecinos del Somontano puedan disfrutar de este enclave.
En el año 1889 el Abad de Montserrat establece una comunidad benedictina con monjes procedentes del Santuario de Treviño (Adahuesca) y de Montserrat en Barcelona, inaugurando el Monasterio del Pueyo el 13 de diciembre de 1889. Se encargaron de atender el culto y cuidar los edificios y el patrimonio del Monasterio.
El 1 de octubre de 1962 la comunidad benedictina abandono el monasterio, y el 17 de octubre de ese mismo año se instala la congregación del Corazón de María que lo hicieron noviciado de la provincia Claretiana de Aragón. Entre sus habilidades se encontraba la elaboración de un buen vino Macabeo, 'que no produce mareo y quita el cabreo', según rezaba su etiqueta de comercialización.
De la presencia de estas dos últimas órdenes religiosas en el Monasterio, ha quedado testimoniada en las dos representaciones de los fundadores que acompañan a la imagen de la Virgen: San Benito, fundador de la orden benedictina, y San Antonio María Claret, fundador de los misioneros claretianos.
Los últimos claretianos han permanecido en el Monasterio hasta septiembre del año 2009, donde actualmente han tomado el relevo los religiosos del Instituto del Verbo Encarnado.
De estilo gótico primitivo, el edificio sigue una línea arquitectónica traída por los monjes cistercienses desde el sur de Francia a finales del siglo XIII. La biblioteca que conserva el Monasterio es uno de sus emblemas, con más de 30.000 obras de literatura latina, española y francesa, sagradas escrituras, ejemplares de derecho canónico y civil, de medicina e historia o ejemplares de cultura aragonesa.
Una extensión espectacular se ve desde el Pueyo por los cuatro costados. Hasta cincuenta pueblos con buen día y buena vista. Desde la mesa orientadora que pusieron los militares del Regimiento de Cazadores de Montaña en un balcón mirador, se señala de Sierra Gratal hasta San Quilez, pasando por Guara o Peña Montañesa.
Para el regreso a Barbastro disponemos de varias alternativas: la primera, volvemos a realizar el mismo camino de subida pero esta vez en sentido contrario; una segunda posibilidad, y si disponemos de tiempo para hacer más turismo libre, podemos atrevernos con rutas alternativas, tanto dirigiéndonos desde la Plaza del Sol hacia el norte, buscando la cantera del Pueyo y el Camino Ras Guardia que nos llevaría hasta Castillazuelo, pero que debemos atajar para no hacer un gran rodeo si queremos volver a Barbastro. Y una tercera alternativa es, buscando la orientación sur para retornar a Barbastro pero a través de campos en Fornillos y recordando la cabañera del Camino Real de Zaragoza.
disponible para patrocinadores, haz click aquí
3 comentarios:
A través de un camino que parte desde Barbastro vamos a recordar la leyenda religiosa de la aparición de la Virgen que sirvió para poner los cimientos del Monasterio de El Pueyo. La dificultad de esta marcha es mínima por lo que es apta para las personas de cualquier condición física.
¡Hola!
Muchísimas gracias por entrar en HELICON, y por las puntualizaciones. Os lo agradezco de veras. Este Monasterio lo vimos desde la carretera porque no era nuestro destino, y nos llamó la atención por la cantidad de antenas de comunicaciones que tiene (¿sabeis vosotros por qué?). Ya en casa busqué información y solo me salía el Monasterio de San Victorian de El Pueyo de Araguas… me costó bastante dar con la información correcta porque solo tenía la fotografía que saqué desde la furgo y más o menos la ubicación. Al final os encontré y debí de entender que era también de la misma localidad de El Pueyo de Araguas, siento la confusión, pero ahora mismo lo rectifico.
También rectifico lo de Quincena, jajajajaja a veces nuestra mente corre mucho más que nuestra capacidad lectora. En todo caso os cuento que en otro viaje por los Pirineos Aragoneses, lo pasamos francamente mal tratando de decir en alto los nombres de los lugares que encontrábamos por el camino, jajajjajaja teneis nombres endiabladamente difíciles de pronunciar en algunos casos.
Pasamos mucho por allí. Tenemos familia en Zaragoza y nos gusta mucho el Pirineo. No es la primera ni la última vez que pasaremos por allí. Lo del vino ya será un poco más difícil, jajajajaja mi marido es de La Rioja, y yo de la zona de Ribera de Duero, jjajajajaja, dura competencia amigo. Gracias por la invitación. Teneis una página estupenda.
Besos.AlmaLeonor
Hola!
Gracias de nuevo por visitar HELICON.
Desde luego que con lo de los vinos nos ponemos como con el futbol, jajajaja Lo de las denominaciones vinícolas era una broma relacionada con nuestros orígenes, desde luego, jajaja Lo de las Antenas, pues será como dices, pero desde la carretera parece un OVNI, jajajjajaja
Y lo de los nombres aragoneses, ya lo señalé en otro viaje que hicimos por Ordesa. Era por la zona de Sobrarbe, no Somontano. Es una simple curiosidad, a saber: Añisclo, Puyarruego, Cascada de Cotatuero, Valle de Vió, Simas de Arañonera, Collado Viceto, Circo Glaciar de Gurrundué… picos como Forqueta Sorripas, Tozales de Lascal, Cachifolluso… Y luego según donde mirásemos (un mapa, un folleto o la carretera) encontrábamos distinta grafía: Revilla / Rebilla ; Escuaín / Escoaín… Y términos para denominar cosas como: Borda (cuadra pequeña), Churro (cascada de agua), Espluca (cueva, sima), Mallata (redil), Puen (puente), Tasca (pastizal) o Zillo (precipicio), todos ellos del dialecto altoaragonés (tengo un diccionario por cierto, jajaja)…. Y más curiosidades como la que nos encontramos pasando Salent de Gállego (como para pronunciarlo deprisa, jaja) y Lanuza (que ya sé que este es el apellido del que fuera Justicia Mayor ): Río Escarra, Túnel Escarra, Camping Escarra, Hotel Escarra y pueblo de Escarrilla……
No es más que una curiosidad que apuntamos en nuestros viajes. Como estudiante de Historia me gusta mucho fijarme en la toponimia de los sitios…. Otro día contaré la que me encontré en un viaje por la provincia de Ávila, jajajajaja
Besos.AlmaLeonor
Publicar un comentario